UN AÑO DESPUES DE REPRESION POLICIAL EN BAGUA

LIMA, 4 (ANSA)- Unos 2.000 indígenas regresarán mañana a la localidad amazónica de Bagua, noroeste de Perú, para condenar la represión policial que hace un año causó 33 muertos -10 civiles y 23 policías- y un policía desaparecido, en un país donde los conflictos sociales -260 de momento- se incrementaron en oposición a la llegada de las inversiones en minería y petróleo, fundamentalmente.

La masacre ocurrió tras dos meses de paro de las comunidades nativas de Bagua que pedían la suspensión de decretos que facilitaban el ingreso de transnacionales para la explotación de recursos en la Amazonía. Algunas de esas reglamentaciones fueron puestas en moratoria tras lo sucedido en Bagua.

Consultada por ANSA, la Defensoría del Pueblo informó que, hasta abril último, había registrado 260 conflictos sociales en el país, 14 más que el mes anterior, y de los cuales unos 80 están en proceso de diálogo con las autoridades.

Para mañana se programaron vigilias, movilizaciones y la realización en Bagua de un foro sobre Criminalización de la Protesta, en el que intervendrán como invitados expertos brasileños.

El dirigente amazónico Alberto Pizango, procesado por supuesta incitación a la violencia en las protestas indígenas en los días previos a la represión policial del 5 de junio de 2009, se encuentra desde el jueves por la noche en Bagua.

Al menos 500 agentes de la División de Operaciones Especiales de la Policía Nacional (Dinoes) se movilizaron para mantener el control en ciudades amazónicas y donde ocurrió la represión policial, en la llamada "Curva del diablo", en la carretera de Bagua, y en la estación número 6 de PetroPerú.

Pizango, quien renunció a su asilo en Nicaragua para someterse a la justicia peruana, lidera las comunidades amazónicas aún cuando dejó de ser el presidente de la Asociación Interétnica para el Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), que agrupa a 300 organizaciones indígenas.

Por su parte, el jefe del consejo de ministros, Javier Velásquez, dijo hoy que "el 5 de junio no puede ser de ninguna manera una fecha que enfrente a los peruanos. Espero que no sea tratado electoralmente", en referencia al proceso electoral en curso, de cara a las elecciones regionales y municipales del 3 de octubre y las generales de abril de 2011.

(ANSA). MRZ
04/06/2010 22:30