n África Subsahariana el principal modelo de producción agraria es el modelo tradicional. Los campesinos heredan y reutilizan las semillas seleccionadas a lo largo de siglos, aplican prácticas consuetudinarias y trabajan con herramientas de fabricación propia. En el continente habita un “altísimo porcentaje de pequeño campesinado con menos de dos hectáreas de posesión.
Por poner algún ejemplo: en Nigeria son el 74 por ciento, en Etiopía el 87 por ciento o, aún más, en la República Democrática del Congo, el 97 por ciento.” La mayoría de la población africana practica una agricultura de subsistencia basada en la obtención de los alimentos necesarios para alimentar a sus familias y, en caso de generar excedentes, para conseguir un dinero extra en los mercados locales.
Asimismo, en el continente africano habita el 26 por ciento del total de la población desnutrida del mundo. Los índices de desnutrición se han incrementado en un 41 por ciento desde principio de la década de los noventa del siglo XX. Hoy en día “más de la tercera parte de los habitantes del continente africano padece desnutrición.” El problema de la malnutrición y el hambre es uno de los principales retos a los que se enfrenta la población africana. En el siguiente gráfico podemos ver la cantidad de personas desnutridas (millones) por regiones mundiales, África ocupa el segundo lugar en cuanto a número de personas desnutridas se refiere.
Según los impulsores de la agricultura industrial en el continente africano, la causa de dichos niveles de desnutrición es el atraso en los sistemas de cultivo, ya que los sistemas tradicionales de producción no son suficientemente eficaces como para alimentar a la población africana. Es por ello que varias instituciones y organizaciones, como la Unión Africana o la Fundación Rockefeller, llevan años trabajando en la introducción de la biotecnología en el continente como solución para los problemas alimentarios del mismo.
Por María Echavarría Alonso, Investigadora en Justicia Ambiental, Departamento de Filosofía, Facultad de Filosofía y Letras, Universidad Autónoma de Madrid.
Para acceder al documento (formato PDF) haga clic en el enlace a continuacion y descargue el archivo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario